Esta recopilación de recursos de cuidado y amor propio nace de un profundo proceso de crearme espacios para sanar el corazón y volver a mí, luego de un tiempo de mucha sensibilidad, introspección y reparación.

Pues cuántas veces se nos ha roto el corazón?

Cuántas veces nos hemos perdido de nuestra esencia, desviándonos del camino, del norte que tan claro parecía?

Cuántas veces nos encontramos juntando pedacitos de nuestra existencia, buscando cómo pegarlos de nuevo, con la esperanza de que no duelan más?

No sé vos, pero yo, un montón.

Y así como siento tanta incomodidad y dolor, también puedo sentir una gran oportunidad de mirar hacia adentro, reencontrarme con partes olvidadas, resignificar y desde ahí, tomar mi poder.

El Tantra siempre me guía y me acoge con su invitación a habitar el cuerpo, el sentir, y el placer, aun cuando a veces pause, me olvide, me pierda. Y es que así es el viaje de la vida… inhalación y exhalación, expansión y contracción, muerte y renacimiento.

Aquí mi Guía Tántrica para Sanar el Corazón, con el deseo profundo de que si estás atravesando una situación incómoda o difícil, pueda acompañarte en el camino de regreso a vos.

  • Aceptar y duelar

A veces no nos queda otra que aceptar la realidad tal y como es.

Más allá de lo que podría ser distinto, lo que es es lo que es.

Eso puede despertar emociones de enojo, dolor, tristeza, y es esperable que así sea. Por favor, no luches con ellas. Son parte necesaria.

Ir a terapia, escribir, llorar son parte del proceso, y cuanto más te entregues a él, más liviano será atravesarlo.

  • Dejarte sostener

Cuando atravesando momentos difíciles, puede ser que tu energía se repliegue y termines aislándote, o por el contrario, que comiences a salir compulsivamente a socializar con todo el mundo, pero desde una superficialidad que luego de un tiempo se vuelve insostenible.

Necesitás preservar tu energía, ya que lo que está sucediendo en tu fuero interno es muy grande, y eso implica cultivar vínculos de calidad. 

Pedir ayuda cuando todo se pone oscuro, rodearte de personas en las que puedas confiar y que te permitan abrirte y hablar con el corazón abierto, que te sostengan y escuchen sin juicio, es un gran tesoro a cuidar.

  • Volver a vos

Recuperar tus rutinas es fundamental para sanar el corazón y evitar el abandono que puede aparecer cuando perdés motivación.

Volver al cuerpo, encontrando aquellas formas de sentir que te estás ocupando de vos para estar mejor.

Cómo te sentís en relación a tus hábitos, a tu aspecto, a tu disfrute en general?

Qué sueños dejaste esperando en un cajón? Cómo sería retomarlos desde el entusiasmo y no desde la obligación?

Qué libros tenés por la mitad y quisieras retomar?

  • Darte lo que necesitás

Practicar la escucha interna se vuelve indispensable a la hora de recuperarte energética y emocionalmente.

Eso significa que se requiere que estés muy atentx a tus deseos y necesidades.

No necesitás salir, “distraerte” y hacer mil cosas si no lo sentís.

Entonces, entrenar tu capacidad para cambiar de opinión, crear nuevos planes, escucharte y recalcular cada vez que lo necesites, es clave.

A veces es algo tan básico como preguntarte: tengo sed? tengo hambre? qué necesito?

  • Menos es más

En el afán de anestesiar todo eso que duele, es muy fácil que te llenes de estímulos para no sentir. 

Volver a lo simple es un recurso que al principio puede sentirse incómodo y aburrido, pero que a largo plazo rinde unos frutos muy ricos.

Menos pantallas, más pasto y cielo abierto.

Menos sustancias, más comida real.

Menos mente, más cuerpo.

Menos hiperactividad, más descanso.

Más calidad, menos cantidad.

  • Construir tu propia expresión de espiritualidad

Para cada persona la espiritualidad es algo distinto, y es importante que si no lo has hecho, empieces a reconocer y/o construir las prácticas que te conecten con algo más grande que vos.

Eso puede incluir prácticas de meditación, respiración consciente, rituales, rezos y danzas devocionales.

Te recomiendo mucho crear tus propios rituales: 

  • Escribir una carta de agradecimiento por la experiencia vivida donde expreses todo lo aprendido.
  • Intencionar tus deseos en luna llena.
  • Construir tus propios objetos de poder (amuletos).
  • Armar tus propias afirmaciones positivas con palabras que te recuerden hacia dónde te estás moviendo. Tenerlas escritas a la vista y repetirlas cada vez que puedas.
  • Conectar con una energía/arquetipo que te convoque y resuene en este momento. Algunos ejemplos son: un dios/diosa, un personaje mitológico, un animal de poder, un elemento de la naturaleza.
  • Escuchar y recitar mantras y altas frecuencias puede ayudarte a elevar tu vibración. 

  • Re.conectar con tu placer

Una vez que la tormenta comience a pasar, es importante que re.conectes con tu cuerpo y tu placer.

Eso incluye hacer cosas que te gusten mucho y te hagan bien, como tener una cita con vos, cocinarte algo rico, agendar un masaje (si es tántrico, mejor!) o regalarte una sesión de autocontacto, generarte espacios de cuerpo, danza y movimiento libre, y caminar bajo el sol.

Incluir en tus momentos con vos mismx la práctica de masturbación consciente puede ser una gran experiencia (no como un momento de tensión y descarga automática, sino como un momento de encuentro genuino con tu deseo, tu cuerpo y tu sexualidad). Para eso es importante que reduzcas al mínimo el uso de pornografía y otras imágenes que te puedan alejar de las sensaciones reales de tu cuerpo.

El placer y el deseo son como músculos, necesitás mantenerlos activos para que respondan en el momento preciso.

Porque aunque no lo creas, tu sexualidad es una experiencia espiritual

 

CONCLUSIONES PARA SANAR EL CORAZÓN

Podés armar, desarmar, probar, rechazar, cambiar y agregar lo que quieras a esta guía, es sólo una base que busca servir de inspiración.

Eso sí, lo más importante que podés hacer hoy, es ser paciente y amorosx con tu sentir. Al fin y al cabo, tarde o temprano la tormenta pasa y el sol vuelve a brillar.

Esto es algo para practicar una y otra vez. No es algo que te saldrá “bien” a la primera, sino que tendrás que volver a empezar tantas veces como sea necesario.

Por último, aunque parezca trillado: confiá en tu proceso. Esto que estás viviendo tiene un propósito mayor, aunque hoy no puedas verlo. Y cuando menos lo esperes, estarás nuevamente compartiendo tu luz con el mundo.

Y si creés que un acompañamiento amoroso y sensible podría ayudarte, te invito a conocer mis servicios.

Estoy lista para acompañarte con el mismo amor que me doy.

Con amor ♥️
Poly